Un ejército de gente balbuceando su verdad, de cosas estancadas que quedaron por hablar.

jueves, 30 de julio de 2009

¿Herida? Sí, humillada, menospreciada ,y no solo por él sino por mi misma, sabiendo cómo iban a funcionar las cosas me lastimé creyendo que algún día me iba a querer como yo, que sus promesas no eran palabras sino que se con cretarían. Humillada porque quise pasar por alto a la que era su prioridad, creyéndome impune ante eso, quise creer que no me afectaba, que no me dolía, al fin y al cabo ella no estaba con él y yo en ese momento sí.
Menospreciada, a él no le interesaba más que satisfacer sus necesidades, para él no represente nada más que “alguien” con quien quiso pasar un buen rato. Me resté importancia, dignidad, valor moral y quise ocultarlo por unos besos que me daba, ni siquiera su compañía.
Pero ahora todo lo anterior no importa, yo di lo que pude dar y aunque no recibí lo que pedí, me siento feliz porque sé que quise verlo siempre bien, que más de lo que hice no pude.. Ahora ya está, ya no se puede volver atrás.

No hay comentarios: